Ficha elaborada por: José Rodrigo Gómez Brol, Quinto Bachillerato, 2015, Colegio Internacional Montessori, Guatemala
Nombre completo

Carolina Escobar Sarti

Nacimiento

Guatemala, 11 de diciembre de 1960

Deceso

 

Información biográfica

Estudié en el Colegio Alemán de Guatemala, de donde se graduó en 1976. Después de graduarse, fue a dar clases a los párvulos en el Colegio Lehnsen de Guatemala hasta 1979. Dejó su trabajo de maestra y se inscribió a la carrera de Arquitectura en la Universidad Rafael Landívar en 1980, la cual cambió un año después por Psicopedagogía. En 1994, tomó una especialización en Población y Desarrollo en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales. Obtuvo una licenciatura en Letras en 1999 en la Universidad del Valle. Luego de esto, obtuvo una maestría en la Literatura Hispanoamericana en la Universidad Rafael Landívar en 2003. Tres años después, en la Universidad de Salamanca, obtuvo otro título: el Título de Suficiencia Investigadora; además sacó un Doctorado en Sociología en la misma institución.

Información académica

Carolina Escobar Sarti tiene una experiencia de 25 años de docencia, ha sido catedrática en la Universidad Rafael Landivar desde 2002 y en la Universidad del Valle de 2002 a 2008. Es columnista de Prensa Libre desde 1997 y lo fue para Siglo Veintiuno de 1993 a 1997. Actualmente, es consultora de proyectos, asociada de Consultores de desarrollo humano; además fue consultora en Comunicación, gestión de proyectos y actividades de iImpacto institucional de 1994 a 1998. Fue presidenta y secretaria de la ADESCA entre 2002 y 2010. Tiene varios reconocimientos, tales como: Premio Unicef a la Comunicación 2000, diploma de participación VIII Congreso Internacional de Filosofía (2009),  reconocimiento como Jurado Premios Ford sobre Herencia Cultural y Medio Ambiente (2009), diploma de la USAC por trabajar en el Enfoque del Género de la Posmodernidad (2009), Visitante Distinguido de la Municipalidad de Granada (2009), reconocimiento por labor dentro de ADESCA (2008), reconocimiento como escritora destacada por el IGA (2007), Cum Laude y tesis con honores UVG (Universidad del Valle de Guatemala),  entre muchos otros.

Información profesional

Carolina Escobar Sarti tiene una experiencia de 25 años de docencia, ha sido catedrática en la Universidad Rafael Landivar desde 2002 y en la Universidad del Valle de 2002 a 2008. Es columnista de Prensa Libre desde 1997 y lo fue para Siglo Veintiuno de 1993 a 1997. Actualmente, es consultora de proyectos, asociada de Consultores de desarrollo humano; además fue consultora en Comunicación, gestión de proyectos y actividades de iImpacto institucional de 1994 a 1998. Fue presidenta y secretaria de la ADESCA entre 2002 y 2010. Tiene varios reconocimientos, tales como: Premio Unicef a la Comunicación 2000, diploma de participación VIII Congreso Internacional de Filosofía (2009),  reconocimiento como Jurado Premios Ford sobre Herencia Cultural y Medio Ambiente (2009), diploma de la USAC por trabajar en el Enfoque del Género de la Posmodernidad (2009), Visitante Distinguido de la Municipalidad de Granada (2009), reconocimiento por labor dentro de ADESCA (2008), reconocimiento como escritora destacada por el IGA (2007), Cum Laude y tesis con honores UVG (Universidad del Valle de Guatemala),  entre muchos otros.

Libros publicados

Título

Año

Editorial

País

Género

La penúltima luz

1999

Ediciones del Pensativo

Guatemala

Poesía

Palabras sonámbulas

2000

Ediciones CES

Guatemala

Poesía

Rasgar el silencio

2003

Palo de Hormigo

Guatemala

Poesía

No somos poetas

2006

F&G

Guatemala

Poesía

Los pequeños pasos en un camino minado: Migración, niñez y juventud en Centroamérica y el sur de México

2008

Codelace, S.A

Guatemala

Ensayo

Patria mi cuerpo. Histroria de una mujer desnuda

2009

F&G

Guatemala

Poesía

Te devuelvo las llaves

2010

F&G

Guatemala

Poesía

Obra

No somos poetas
(Tomado de: No somos poetas)

Somos apenas amantes
suicidas con la cuerda
en la mano
caminantes de antes
usurpadores de abecedarios.
No somos poetas
somos adivinadores 
de oscuras cavernas 
transeúntes por azar
locos por vocación.
Somos talladores de nubes 
lluvia sostenida
cuerpo que recuerda
hambre insatisfecha
confesión última 
dueños de medio corazón
límite de penumbra
sangre que camina el mundo
puerto de anclaje y despedida
sólo somos tiempo
una carta interminable
que continúa escribiéndose
sin fecha de entrega.
Somos una arruga en el mediterráneo
buscando, no los seis días de la creación
sino los siete minutos
de nuestra vida compartida.
Y esto no es un poema
sino el  inicio del primer minuto 
                            (el nuestro)
porque después todo estuvo aquí
para siempre.
El credo levantado,
el caos, el misterio, 
el asombro y el verbo.
La santísima palabra
en el universo
de la salamandra.
El fuego robado
porque el paraíso 
también es nuestro.
Fundamos la memoria
de la luz y el perfil de la montaña
probamos primero la sal 
en el océano de nuestros ojos 
y nos supimos robustos árboles
no ramas quebradizas.
Aullamos a la luna 
reclamando al sol su eclipse 
e hicimos el amor 
en los siete mares.
Sea la luz
y fue la luz.
Todo somos
menos poetas.


Somos apenas amantes
(Tomado de: No somos poetas)

Que levantan templos
sin altares en otro cuerpo,
oblicuas caricias
en línea de agua.
Somos atrio sin bordes.
Amantes condenados 
por los siglos de los siglos
a renegar del miedo,
de la muerte y
de la soledad.
(Antes de ti
yo era animal
ahora soy lenguaje).
Somos apenas amantes.
Distancias agotadas
en el mínimo territorio
de la redención (por mi culpa
por mi culpa
por mi gran culpa).
Escritores de epitafios
en las paredes de la historia.
Despertamos al pez, al mono
y al dinosaurio
y tatuamos sus nombres
en nuestro cuerpo epistolar.
Somos exilios justos 
de planas cartografías
que encuentran agua
en sus montañas.
No poetas
apenas amantes.


Carta segunda
(Tomado de: Patria mi cuerpo: Historia de una mujer desnuda)

Yo soy un cuerpo
y esta una carta de amor
escrita tantos siglos calle arriba
para vos
quería contarte
que corren los tiempos del desamor
que hay humo en la conciencia
que la lengua del perro
ansía agua en cada esquina
te he pensado mucho
palabra insomne sonámbula
que no es palabra
porque no tiene un cigarro en la boca
pero se escribe
en su oscura madrugada
pegajoso cuerpo sudando alfabetos
para narrarte
que hay olvido asfaltado
y mendrugos de sangre en las venas
se secan los ríos
en fábricas que maquilan memoria 
las pieles de los animales no están en su piel
y la luna ya no tiene gatos
el mundo ha cifrado su ausencia 
en pantallas gigantes y represas 
que sólo esperan
la grieta para desbordarse
por las agendas electrónicas
vertiginosos breviarios de la vida
lo sabemos todo
gordas enciclopedias océanicas
sin horizonte 
pero apenas con un dedo
de profundidad
quien tiene la información
tiene el poder
voluntad automatizada
voy a prepararme un café 
descafeinado
por favor esperame
ahora vuelvo 
la carta continúa
¿dónde íbamos? 
Ah sí
te decía 
que lo sabemos todo
menos nuestra hondura
no sé si allá con vos pasa igual 
pero acá la miseria
es cuadro mutilado
la pobreza mendiga
perturbadora
y aún cuelgan de los cuellos 
los San Benitos de la inquisición
los cuerpos se vuelven edificios
cada uno quiere ser más alto
el más alto del mundo
después de las bombas
pelo, uñas, sangre, una foto
se enfrasca lo humano
se entierra
la inocencia ya no juega
hay entretenimiento de sobra
pero se está quedando sin jardín
parece que no queda nada 
por inventar
salvo la vida
pero quería confesarte
que aún oigo el canto 
de las aves de mayo 
anunciando la lluvia
semillo mis ojos en el porvenir
me trazo 
en la arqueología de la memoria
amo
me duelo 
me levanto erguida
sé que estás
a la vuelta del poema
sos el otro la otra 
lo que somos
dibujo el contorno de la huella
me quemo los pies en el centro
de la tierra
soy cuerpo sembrado 
de astros
quería decírtelo
esta carta es para vos
el universo duerme
y encima de las tumbas nacen flores
la poesía todavía me destruye
en su peligroso silencio
nos deja solos a vos y a mí
pero creo
creo
no sé por qué
creo.
Despunta el alba.

 

Nos detuvimos
(Tomado de: Te devuelvo las llaves)
Nos detuvimos
vos y yo
frente al perro moribundo
nos encontramos
dando vueltas a su alrededor
buscando aire en el cuerpo.
Tan parecido lo que se muere.
La respiración huye en silencio
lentamente por donde 
algún día se coló el olor de lo nuestro
olfato de perro perdiguero
que agoniza.
Abre un ojo y se muere
el cansancio saca la lengua
y se muere
los siglos se mueren
esto se muere.
---
Anochece en las horas que mueren
anochecemos
nuestro mar descubre monstruosas criaturas
hunde barcos 
hace aparecer islas.
Asistimos a nuestro naufragio.
Te vas al anochecer
por eso no duermo desde hace un siglo.
---
No pondría entre nosotros 
una espada.
Nos hemos guardado 
el dolor de los años
sin decirnos nada
nos hemos negado
la verdad.
Ha sido sólo el miedo
mío de la soledad
tuyo de la muerte
un mismo miedo.
En una noche 
en un instante de claridad
cualquiera levantaría
la espada
y decidiría cobrarse
la vida 
que nos robamos.
---
…..y aunque ya no te ame
te amaré para siempre.
Me iré por allí
escalando por las pendientes
de otras vidas
y sentiré vértigo cuando 
vea el tamaño
de lo que dejamos atrás
……y aunque ya no te ame
te amaré para siempre.
Llevaré un lazo
amarrado a la cintura
para no caerme 
aunque me caiga
las horas nuestras
las que se fueron
las puse ya en mi espalda 
para el viaje
y empacaré alimento
para no tener toda
esta hambre de ti
……y aunque ya no te ame
te amaré para siempre.
---
Amanezco
(sin vos)
en el país que duerme.
Amanecieron antes mi abuela y mi padre
en este lugar donde
el imbécil sigue siendo
imbécil
y el ladrón, ladrón. 
Mi abuela y mi padre están muertos.
Mi país también.
--------
Apenas mayo
y hay ave que promete
su canto.
Estoy de vuelta 
en el inicio del mundo
como cuando la tierra era roja 
y el cielo comenzaba a ser ventana.
En la mitad del mes de la buena diosa 
 he devuelto todas las llaves 
y desconocido sus cerraduras
(mis ojos en el fondo del océano transparente
recorren asombrados la ruta de la seda
cuando las ideas viajaban en camello
y el amor no era un concepto)
hoy
sólo existe el primer canto
del ave desnuda
que se ha atrevido – suicida-
a fermentar el aire
de los siglos.
Apenas mayo
y el océano se derrama en su gota.
Todos los siglos.
Estoy de rodillas
en el umbral de fronteras porosas
y es apenas un mayo
es apenas un nido 
es apenas un ave
y todas sus alas.


Usurpadores de abecedarios
(Tomado de: No somos poetas)

Ladrones de epitafios
escaladores de la Torre de Babel
todo ha sido dicho
y nos creemos poetas.
Simples usurpadores 
de abecedarios
lo hemos prestado todo.
(En el principio fue el Verbo.)
Soberbios dueños
de segundas verdades
recolectores de
antiguas cosechas
descifradores de veladuras
sentados a la 
derecha del Padre.

Traperos de alfabetos
robamos
escalamos
usurpamos
prestamos
poseemos
recolectamos
desciframos
y nos decimos
poetas.

 

Crítica

Crítica al libro Te devuelvo las llaves:
"Devolver las llaves es cerrar una puerta, terminar una etapa, acabar una empresa, concluir un ciclo, emprender un nuevo viaje, es lanzarse a lo desconocido y se necesita valor para hacerlo. Carolina Escobar Sarti lo hace en su libro que consta de 35 poemas adoloridos y muy bien formulados que nos devuelven a lo que es el rompimiento de la pareja. “Il n’y a pas d’amour heureux”, dice el refrán y el amor que se respeta termina en la separación de los amantes. O en la muerte. Carlos Pellicer, Jaime Sabines, Octavio Paz, Pablo Neruda, César Vallejo, Ernesto Cardenal, Gabriela Mistral le cantaron al amor para que no muriera y ahora la joven Carolina insiste en el mismo ruego porque tal parece que en América Latina sólo hay espacio para la pobreza, la muerte y el fracaso de los combates. Si todo lo político es personal, un poema de amor también es político y en la obra de Carolina Escobar Sarti los amantes se forjan a recuerdos con palabras que duelen y se encajan en la piel. Carolina atesora lo que fue de los amantes, y al igual que ella sabemos que lo único que conservamos hasta la muerte es el recuerdo del amor que alguna vez nos poseyó".


Elena Poniatowska

 

Carolina Escobar Sarti es una mujer cuyos poemas son parte de la riqueza de Guatemala. Su obra es muy profunda y crea una amplia gama de sentimientos en mí al leerlos; me trae muchos recuerdos de mi vida. Aparte de ser escritora, es una académica muy respetada. Por personas como ella, es que nuestro país se hace más rico cada a día y va creciendo nuestra cultura.

Rodrigo Gómez
Fuentes

Arévalo, Rodolfo. fygeditores.blogspot.com. 23 de 3 de 2012. 9 de 2 de 2015 <http://fygeditores.blogspot.com/2012/03/carolina-escobar-sarti.html>.

 Amor, Elena Poniatowska. www.fygeditores.com. s.f. 9 de 2 de 2015 <http://www.fygeditores.com/FGTDL9789929552050.htm>.

Guatemala, Universidad del Valle de. www.uvg.edu.gt. s.f. 9 de 2 de 2015 <http://kirika.uvg.edu.gt/info-academica/u-academicas/cc-hh/licenciaturas/letras/CarolinaEscobarSarti.pdf>.

Poesía, Revista Latinoamericana de. www.festivaldepoesiademedellin.org. 7 de 2010. 9 de 2 de 2015 <http://www.festivaldepoesiademedellin.org/es/Revista/ultimas_ediciones/86_87/escobar.html>.